El verdadero origen de la fortuna del rey emérito (5)

Vendredi 20 août 2021

Exclusiva de Público

El verdadero origen de la fortuna del rey emérito (5)

Juan Carlos I utilizó Patrimonio Nacional para pagar lujos a sus amantes y los gastos de sus palacios, yates y viajes

El rey emérito se aprovechó de la exención fiscal de Patrimonio Nacional para no pagar impuestos por donaciones valoradas en más de 100 millones de euros. También blanqueó al régimen de Arabia Saudí con un diálogo interreligioso en Madrid presidido por el rey Abdalá (a quien un año antes otorgó el Toisón de Oro) sólo tres semanas antes de recibir en Suiza los 65 millones saudíes.

Madrid 19/08/2021 21:59 Carlos Enrique Bayo@tableroglobal

En el capítulo anterior de esta serie de investigación ya planteamos el misterio sobre el origen y el motivo del « regalo puro » por valor de 65 millones de euros que recibió Juan Carlos I en Suiza, el 8 de agosto de 2008, sólo cinco meses después de que su intervención ante el Tribunal Constitucional lograse librar de prisión, a costa de un grave enfrentamiento interno en el Poder Judicial, a Los Albertos (Alcocer y Cortina) que administraban su fortuna.

Esa transferencia llegó a la cuenta 505.523 que acababa de abrir (el día anterior) el propio Juan Carlos I en la banca Mirabaud de Ginebra, como titular y en nombre de la « cocontratante Fundación Lucum de Panamá », dando como residencia « Palacio de la Zarzuela – Madrid ». Según el extracto bancario de esa cuenta correspondiente a agosto y septiembre de ese año, que publicó la Tribune de Genève, el ordenante fue el « Ministerio de Finanzas de Riad », y el concepto « donación del rey de Arabia Saudí » por 100 millones de dólares (64.884.405,58€).

Lo que no está aclarado, y actualmente investiga el fiscal federal suizo Yves Bertossa, es la verdadera razón de que el Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas regalase al rey de España esa cantidad astronómica (unos 10.800 millones de las antiguas pesetas). Un « obsequio » cuya recepción había anunciado meses antes Juan Carlos I a sus dos brókers suizos, Arturo Fasana y Dante Canonica, quienes constituyeron (como presidente y secretario) la Fundación Lucum en Panamá, el 31 de julio de 2008, precisamente para percibir tan enorme cuantía de dinero. Lire la suite.

Revenir en haut